No se pierdan este reportaje. Es desolador comprobar hasta qué punto ha calado en la juventud la imagen de un supuesto conflicto étnico secular entre dos bandos, el vasco y el español, que explicaría toda la historia reciente de Euskadi y especialmente su parte más oscura. Cuando la historia no está ahí (otro debate es por qué no lo está), la propaganda ocupa su lugar.